Hoy te traigo un secreto para que el pollo cocinado sin piel y sin grasas quede tierno, jugoso y con un sabor increible, tan rico que no te creerás que es de dieta.
Cuando hacemos dieta lo más aconsejable es cocinar las aves sin piel, ya que es en la piel donde se acumula la mayor parte de la grasa del animal. ¿Pero que pasa cuando cocinamos el pollo sin piel? Pues que queda soso, reseco y sin gracia, excepto si lo marinas ;-) Y tenemos un ingrediente ligeramente ácido y libre de grasas que deja la carne suave y jugosa, usando este ingrediente como base del marinado podemos añadir infinidad de ingredientes para preparar mil recetas diferenes y conseguir unos marinados muy suaves y ricos que te encantarán.
¿Que cual es ese ingrediente mágico? ¡Pues el yogur! Y lo mejor de todo es que con esta técnica no tienes nada de trabajo y no ensucias nada de nada en la cocina, es ideal.
Coges el pollo salpimentado y lo pones en una bolsa apta para el horno, añades el yogur y el resto de ingredientes del marinado segun el sabor que le quieras dar a la receta. Puede ser una receta de tipo provenzal añadiendo hierbas arómáticas y champiñones, de tipo asiático con soja y jengibre, con aires italianos con albahaca y limón o centroeuropeos con mostaza, pepinillos y alcaparras. O puede tener el aire que a ti te apetezca, ¡con todo queda bien!
Seguidamente cierras la bolsa y la guardas en la nevera a marinar, como mínimo una noche aunque puede estar dos o tres días sin problemas, con lo que es ideal para prepararlo el domingo, si tienes más tiempo, y tienes la comida lista para dos días diferentes. Solo te quedará meterlo en el horno a 180º durante una hora aproximadamente y listo. Ya te lo he dicho, súper fácil, rápido y ¡sin ensuciar cacharros! Bueno, si quieres darle un toque gourmet tendrás que ensuciar solo una sartén, cuando el pollo ya esté listo verás que te ha quedado una salsa muy líquida, yo lo que hago es poner todo el interior de la bolsa en una sartén a fuego muy alto y dejar que se evapore el líquido hasta conseguir una salsita espesa y ligada, así queda de película.
Si tienes que cocinar para toda la familia no prepares platos diferentes para ellos, al final te cansarás y mandarás todo a la porra. A ellos les encantará este plato con su salsita y todo, lo único es que su ración será más grande que la tuya y su guarnición diferente, más calórica. Tu acompañarás tu plato con un poco de quinoa o arroz hervido con verduras o una patata pequeña hervida o un poco de legumbres hervidas y sin aceite. Para el resto de la familia el arroz hervido o la quinoa puede ir sofrito con AOVE y unos ajos, piñones y pasas, las patatas fritas y en más cantidad y las legumbres también rehogadas en AOVE con ajos y perejil. Y ellos pueden tomar pan, ¡claro! ¿Has visto que fácil cuando haces dieta cocinar para toda la familia?
Para que te acostumbres a usar esta técnica en tus platos de dieta te voy a dejar dos recetas maravillosas de pollo marinado en yogur: Pollo marinado en yogur con limón y albahaca y pollo marinado en yogur con mostaza y alcaparras, ambas están publicadas en mi blog Les receptes que m'agraden donde encontrarás además otras ricas recetas de dieta en la etiqueta "OperaciónVidaSana" y también en la etiqueta "Operación Bikini". Te dejo ahora con estas dos recetas, ¡pruébalas y me cuentas!
Pollo marinado en yogur con limón y albahaca
Pollo marinado en yogur con mostaza de Dijon y alcaparras
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